La historia no es nueva. El protagonista sí. Perivaldo Lúcio Dantas, internacional con Brasil en 1982, desapareció del radar futbolístico a mediados de los ochenta. Durante años, su destino fue desconocido por los más eruditos del fútbol. Pero un programa de televisión brasileño lo encontró en Lisboa, viviendo entre calles y albergues, y rebuscándosela para poder sobrevivir. En el artículo anterior hablamos de Cuentos de Futbol.
Nacido en 1953, Perivaldo Lúcio Dantas se desempeñó principalmente como lateral derecho y alcanzó su pico futbolístico a fines de los setenta y comienzos de los ochenta. A partir de 1973 defendió sucesivamente los colores de Itabuna, Bahia, Botafogo, San Pablo, Palmeiras y Bangu hasta 1986.
También jugó en la selección brasileña de 1981 y 1982, la misma en la que descollaron Zico y Sócrates. Pero, al no haber integrado el plantel del mundial de España 82, su nombre no quedó tan fuertemente grabado en la memoria de los aficionados al fútbol.
Lamentablemente una seguidilla de lesiones fue alejando al deportista del fútbol de primer nivel. Poco se sabe aún de su trayecto posterior a Bangu. Aparentemente estuvo en equipos de Asia y Portugal, en donde finalmente ancló.
Cita de Perivaldo Lúcio Dantas
“Tuve un buen reloj, un rolex” le contó a periodistas brasileños la semana pasada. “Tuve una casa, una casa que vendí, que vale unos 300 o 400 mil euros“. Según cuenta, tomó una serie de malas decisiones económicas y tuvo una relación con una portuguesa de la que no salió bien parado.
Hoy, lejos de esos momentos de esplendor, vende ropas viejas y saldos en ferias de Lisboa para poder comer. Pero eso no le impide perder el buen humor: “Ahora que está llegando el invierno preciso armar una nueva colección“, planifica.
Al enterarse de la situación de este jugador, organizaciones que velan por los derechos de los deportistas, como la Asociación de Garantía para el Atleta Profesional de Bahía, declararon su disposición a ayudar a Perivaldo. Por su parte, la FENAPAF (Federação Nacional dos Atletas Profissionais de Futebol) afirmó que se hará cargo del viaje de regreso de Perivaldo y de que pueda tener una vida decorosa en Brasil.
FENAPAF esfuerzos para brindar asistencia
“Tenemos que ayudar a Perivaldo. Es un atleta que tuvo historia en Brasil, que está en tierras lejanas. Si tiene que volver a Brasil, daremos todo de nosotros para que lo logre“, explicó Alfredo Sampaio, vice-presidente de FENAPAF.